Lifestyle

Cómo llevar ropa de mil colores para elevar tu estado de ánimo

Cualquier color que vestimos tiene un significado y produce un efecto en nuestro estado de ánimo. Este es el fundamento base de la actual psicología del color.

Cada color produce una sensación diferente en nosotros y nos predispone a un estado anímico u otro.

El rojo es la pasión y la energía, el azul se asocia a la sinceridad y la calma, el verde es un pequeño guiño a la naturaleza, el amarillo a la positividad, el blanco a la pureza... Y así un sin fin de tonalidades que harán que tu día a día sea mucho más llevadero de lo que imaginas.

Queremos que apliques esto a tu forma de vestir, sobre todo en esos días en los que tengas algún que otro bajoncillo. No pasa nada en absoluto, es normal. Pero ¿qué te parece si añadimos una dosis elevada de vitamina cromática a cada estilismo para animarlos? Tampoco esta mal, ¿no crees?

De una pieza

Los vestidos estampados en colores superllamativos son el claro ejemplo del triunfo del color. Vestirte con una pieza que se convierta en una especie de lienzo en movimiento, es fabuloso. Sobre todo porque, además dd animarte a ti, también lo harás con quien te cruces en el camino.

Nuestra recomendación es que lo hagas en tonalidades pasteles, que te aportaran un plus de calma en los días movidos, o con geometrías que recuerden a obras de arte. ¿El efecto? Trazar el día lo mejor que puedas con un buen estilismo.

Pequeña dosis

Para los días en los que los excesos cromáticos no te funcionan, pero necesitas un poco de alegría en el estilismo, céntrate en los accesorios. Las gafas de sol, los bolsos e incluso la bisutería pueden ser grandes aliadas en elevar tu ánimo. Si te declinas por los colores pasteles –rosa chicle, azul bebé, gris perla...– el resultado será un combo con estas características: paz, serenidad y dulzura.

Mezcla de sensaciones

Hay días en los que los sentimientos varían a lo largo de la jornada. Te levantas con la esperanza y la creatividad que otorgan el verde y el naranja, pero quieres incorporar un toque de energía y libertad a cargo del amarillo y el azul. Así que, ¿por qué no crear un cóctel de sensaciones y un 'lookazo' con mezclas de estampados?

Menos es más

Mezclar colores vitalistas en tu estilismo a través de la técnica del ‘color block’ es la manera más sencilla de lograr una armonía. Lo único que debes hacer apostar por aquellos tonos que te hacen sentir bien y mezclarlos entre sí. En este caso, olvídate de los estampados. Siempre es mucho más impactante –a todos los niveles– vestir con prendas lisas.

De dos en dos

Elige dos colores. La esperanza que transmite el verde y la dulzura del rosa son perfectos para experimentar, pero todo dependerá de cuáles sean tus favoritos y cómo te sientas ese día. Lo interesante de esta propuesta es que podrás lanzar mensajes claros a tus interlocutores –el rojo es valentía, el morado simboliza el lujo y la espiritualidad...– solo tendrás que elegir con los que te identificas.